¿Cómo viajar con mascotas en auto?

Nuestras mascotas son parte de nuestra familia. Y nuestras vacaciones no serían lo mismo sin su compañía. Por eso, cada verano, nuestros gatos y perros cambian de aires con nosotros y disfrutan de unas vacaciones en la playa o en el pueblo. Ahora toca saber cómo viajar con ellos en el coche de forma segura, garantizando que no haya ningún percance.

Consejos previos al viaje

Conviene hacer una visita al veterinario para que haga un chequeo a nuestra mascota y descarte cualquier problema de salud. Además, podremos consultarle nuestras dudas y, en el caso de que el perro o el gato sea propenso a mareos o a ponerse nervioso en espacios cerrados, podrá recetarnos el tratamiento más conveniente para que el animal no sufra estrés durante el trayecto.

No es recomendable darle de comer justo antes de iniciar ruta para evitar así posibles indigestiones y no se nos pueden olvidar algunos de sus juguetes para que tenga entretenimiento durante el viaje y esté más distraído, sin prestar atención al hecho de estar en el coche más tiempo del habitual.

 

Hora de arrancar: Los tipos de sujeción

Para decidirnos por el mejor sistema de sujeción para nuestra mascota tendremos que fijarnos en su tamaño y en su peso. En función de estos dos factores, podremos decidir entre una jaula transportadora, un arnés de viaje o, incluso, una red divisoria si tenemos la suerte de contar con un vehículo grande.

La jaula transportadora será lo más adecuado para animales pequeños o medianos. Siempre que tengan suficiente espacio para tumbarse y viajar cómodamente, estas pequeñas jaulas serán colocadas en el suelo del asiento trasero del vehículo.

Si tenemos un perro demasiado grande para meter en un trasportín, deberemos optar por un arnés de viaje, preferiblemente de dos enganches. Este arnés quedará enganchado a los cinturones de seguridad y ajustando su recorrido, haciéndolo más corto del que permiten los cinturones habitualmente, así garantizamos que nuestro perro no choque contra los asientos delanteros en caso de frenada brusca o colisión.

Pero si nuestro perro está más cerca de un caballo pura sangre que de un teckel, es preferible optar por una red divisoria, siempre que tengamos un vehículo que lo permita. Estas rejillas se colocan entre los pilares de la estructura del coche e independizan la parte trasera del resto de la cabina. Aunque el consejo no queda aquí: es recomendable, aún así, meter a nuestro perro en una transportadora adecuada a su tamaño y colocado en sentido trasversal a la marcha puesto que, de no hacerlo y en caso de accidente, el animal sufriría las consecuencias de ir suelto dentro del espacio del coche.

 

Y durante el viaje…

No hay que olvidar que los animales, al igual que las personas, se cansan. De estar en la misma postura, de llevar encogidas las piernas (o las patas, en su caso)… Por eso, resulta más que recomendable parar cada dos horas y permitir que salgan del vehículo, se hidraten, hagan sus necesidades y se estiren. Aunque mucho cuidado a la hora de dejarles salir. Antes de sacarlos del vehículo hay que asegurarse de atarles con la correa, de no ser así corremos el riesgo de que el animal salga disparado y provoque un accidente.

 

Un último consejo:

Si nuestro viaje es al extranjero, recuerda consultar los documentos necesarios del país destino para viajar con nuestra mascota sin problemas.


Seguro de auto USA

Cobertura para autos particulares no residentes, diseñada para cubrir la responsabilidad por daños ocasionados a terceros en bienes y personas mientras se encuentre circulando en los Estados Unidos de América y Canadá.